jueves, 13 de septiembre de 2007

CORAZÓN PARTIDO

A pocos días del enfrentamiento entre el Real Murcia y el Atlético de Madrid, es inevitable recordar un hecho que no pasa desapercibido en la historia del deporte. Un jugador vinculado a ambos clubes, que vivió un triste final de su carrera deportiva y de su senda por la vida.

Hablamos de una persona que defendió los colores de los equipos que este domingo se enfrentan. Fernando Vigueras fue sevillano y jugador del Real Murcia. Disputó en sus filas en la temporada 1931/1932.

(En la fotografía le vemos junto a sus compañeros del Real Murcia)
Queremos recordar un hecho que unió a 2 clubes en una misma tristeza.
Fue una figura muy destacada como centrocampista del equipo durante esa campaña, lo que motivó que la directiva pimentonera quisiera renovar su contrato. Cuando la renovación estaba casi cerrada, el futbolista decidió aceptar una oferta del Atlético de Madrid y decidió vestirse con la rojiblanca en la próxima temporada, 1932/1933.

El club colchonero se encontraba en 2ª División. La temporada 32/33 comenzó incluso peor que la actual; empate a cero en casa ante el Coruña, goleada ante el Real Unión de Irún 7-1 y derrota en casa ante Osasuna 1-5. Aún así el equipo supo remontar posiciones en la tabla clasificatoria y acabó la temporada en un segundo puesto que no le dio el ascenso a la categoría de oro.

Una vez finalizada la temporada, el Atlético de Madrid emprendió una gira por el norte de África. Después de disputar varios partidos en Casablanca y Orán llegaron a Argel, en donde se enfrentaron a una selección universitaria franco-argelina. El partido acabó con empate a 3 goles.

La misma noche del partido cuatro futbolistas del Atlético de Madrid: Mendaro, Martínez, Vigueras y Castillo decidieron salir a pasar unas horas en una sala de baile de la ciudad. En su regreso al hotel, los futbolistas presenciaron una riña entre dos mujeres en plena calle y decidieron interponerse entre ellas para separarlas. En aquel momento llegaron al lugar varios policías de paisano que, sin identificarse, comenzaron a golpear a los jugadores quienes, a su vez, repelieron la agresión. Posteriormente llegaron más agentes, detuvieron a los cuatro futbolistas y los condujeron a las dependencias policiales. Una vez en comisaría, los policías identificaron a los detenidos como extranjeros y se ensañaron con Vigueras (que había sido quien había ofrecido una mayor resistencia) al que golpearon brutalmente hasta que, a consecuencia de la paliza, el jugador quedó tendido en el suelo del calabozo, falleciendo poco después.

Horas más tarde, Ocerín, directivo del Atlético de Madrid y delegado de la expedición, se personó en comisaría. Los mandos policiales le comunicaron que Vigueras había muerto y que sólo dejarían en libertad a los tres futbolistas detenidos (Mendaro, Martínez y Castillo) si firmaba un documento en el que reconocía que Vigueras había fallecido porque, accidentalmente, se había caído por una escalera y se había fracturado el cráneo. El directivo madrileño, ante las súplicas y los lloros de los jugadores, se vio obligado a firmar el documento para evitar males mayores.

La prensa española publicó en un principio la versión oficial de los hechos y tachó la muerte de Vigueras de ''desgraciado accidente'', pero una vez que la expedición del Atlético de Madrid regresó a España se dio a conocer la realidad de lo sucedido. Ocerín contó que firmó el documento bajo amenazas de muerte. El Ministerio de Estado español trasladó una enérgica protesta al francés que argumentó que, aunque la ciudad estaba bajo protectorado de este país, los policías eran nativos y por tanto ellos no podían responsabilizarse de sus actos. Por su parte los argelinos se escudaban en un documento oficial firmado por el jefe de expedición del Atlético de Madrid en el que éste reconocía que la muerte de Vigueras había sido un accidente.

La semana anterior a su muerte se especulaba con su posible alineación para reforzar a un combinado murciano que iba a disputar un partido para homenajear al ex jugador pimentonero, Zamora.

En la campaña siguiente el Atlético Madrid sí logró el ascenso a Primera División. Los colchoneros finalizaron en segunda posición tras el Sevilla, pero la ampliación del número de equipos de la máxima categoría del fútbol nacional, de 10 a 12, posibilitó que ese año también ascendiera el segundo clasificado.
Desde este humilde blog queremos dedicar el partido del domingo (que enfrenta a los clubes de esta figura) a él mismo, a Don Fernando Vigueras. Que disfrute desde ahí arriba del partido, y lo mantengamos ambas aficiones en la memoria como mínimo tributo a un grande.

Fernando Vigueras tenía el corazón partido por 2 equipos, y nos lo dejó destrozado a los aficionados con su repentina retirada de este mundo.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy buen post. Perfecto recuerdo del caso Vigueras. Los polícias franceses acabaron con la vida de un rojiblanco. En aquellos años, Francia dominaba esa zona de Africa como país colonizador.

un abrazo

Anónimo dijo...

Un post emotivo. Me ha gustado leerlo no por lo que contaba (evidente)si no por cómo lo contaba.

Un beso.

Anónimo dijo...

Si copiais una información de Internet no está de más que citéis la fuente

http://www.regmurcia.com/servlet/s.Sl?sit=c,30&r=ReP-18662-DETALLE_REPORTAJESPADRE